Feliz Año nuevo... como todos los años
Pues sí, un nuevo año ha comenzado. Como todos los años. Da la impresión de que esa fecha es un “punto de inflexión”, un momento en el que, por arte de magia, todo cambia y es diferente, simplemente por haber comenzado Enero. Un mes que, si hacemos memoria, ya empezamos también el año pasado. Y el otro, y el otro… Recuerdo una tertulia en la que se hablaba de todos los cientos y miles de propósitos nuevos para este año. “¿Cómo no se les habría ocurrido eso hasta ahora?”–me preguntaba yo-. Pero parece ser que esos propósitos e ideas no eran nuevas. Por lo visto, según se descubre cuando uno investiga un poco, esos mismos pensamientos vuelven año tras año, por aquello de “este año sí que sí”. Vamos, la euforia del momento trascendente de las uvas y la fiesta, el cava y todo eso. No estaría de más que, junto a lo bien que está hacer propósitos para el año que comienza, nos recordaran que, en este mundo en el que confluyen la magia y la matemática, lo sublime y lo cotidiano, lo visible y l...